El equipo de Quilmes dejó listos sus dos monoplazas y está en tratativas con un piloto del sur argentino.
El MS Racing es uno de los equipos de la Fórmula 2.0 Renault Copa Pirelli que volvió al trabajo y se prepara para lo que será la temporada 2020, la cual aún no pudo ponerse en marcha por la expansión del coronavirus en el país. La escuadra está cerca de cerrar con un piloto de Tierra del Fuego y la otra unidad que tienen está en alquiler.
“Por la pausa que generó el coronavirus, tuvimos la posibilidad de repasar los autos y hablar con distintos pilotos que tenían ganas de sumarse a la categoría. Así que nosotros nos preparamos para llegar bien al momento en que empiecen las competencias”, manifestó en primera instancia el titular de la estructura, Marcelo Sabella.
Además, el responsable de la escudería con sede en Quilmes habló de los trabajos que se llevaron a cabo en los monoplazas: “Los autos de la Fórmula 2.0 Renault Copa Pirelli se desarmaron íntegros y se revisaron de manera exhaustiva. Además, estamos en conversaciones con un piloto de Tierra del Fuego y estamos haciendo las gestiones para poder arrancar el año con él. Igualmente estamos esperando un poco para ver cómo se desarrolla todo esto”.
Por último, Sabella remarcó que la labor conjunto que hacen con Nicolás Varrone permite que los autos se mantengan competitivos: “Trabajamos mucho sobre el auto con Varrone y en el último tiempo seguimos probando cosas. Creo que nos vamos a mantener competitivos en la medida que los nuevos pilotos giren y podamos avanzar sobre los desarrollos”.
En tanto, la relación entre el MS Racing y el piloto de Ingeniero Maschwitz viene de larga data, ya que el preparador de Zona Sur le inculcó toda su experiencia y el paso por la “Fábrica de Talentos” le permitió entrenarse de la mejor manera para llegar al automovilismo internacional. Vale recordar que Varrone se consagró campeón de la Fórmula Renault VDV Sports en 2018 y en 2019 volvió a poner la bandera argentina en los más alto del podio luego de ganar en la F3 Británica, categoría que tuvo que esperar 23 años para que un piloto nacional vuelva a triunfar en una final.