Villa Carlos Paz (Córdoba), 22 de Julio de 2016.- Con cara de niño y espíritu de hombre, Matías Fernández ascendió en el presente año un gran peldaño en su carrera deportiva. Con importantes pergaminos en el karting nacional y otros que revalidará a fines de temporada en el ámbito internacional, debutó en el mes de Marzo en monopostos, siendo más que destacada la labor en la Fórmula Renault 2.0 que lo muestra los fines de semana de competencia junto al Súper TC2000. Compartiendo el sector de boxes con sus ídolos del Súper TC2000, se encuentra éste representante de Villa Carlos Paz, quien con solo 16 años y cara de niño, asoma cómo una de las promesas del futuro que hoy hace escuela en la ?Fábrica de Talentos?. Con la pasión por el automovilismo heredada desde la cuna, su inicio fue otro, lejos del mundo motor? - Desde chico, más o menos a los 4 años, empecé haciendo bicicross. Mi abuelo había corrido en bicicleta, uno de mis tíos en rally y mi papá también en rally, pista y areneros, él fue campeón en varias categorías. En bicicross hice un año pero desde que agarré el karting no lo largué más, fue amor a primera vista. Es el día de hoy que tengo la bicicleta tirada en un galpón de mí casa. ¿Cómo llega a tus manos ese primer karting? - Cuando cumplí los 4 años me lo regaló mi bisabuelo. Así empecé a probar y llegamos a correr. Lo hacíamos entre todos, mi papá me daba la indumentaria y mis tíos que eran fierreros me ayudaban junto a mis abuelos y bisabuelo para el resto, así podíamos correr. A los 7 empiezo a competir a nivel nacional, creo que ahí empieza a tomar vida el Mati Fernández como piloto, aunque desde los 5 ya estaba compitiendo. ¿Y cómo se desarrolla la trayectoria en el karting? - A los 7 empecé en Buenos Aires en el Campeonato Bonaerense y también en el Argentino. En el 2008 salí campeón en la Rotax y el Bonaerense. Después seguí corriendo en Buenos Aires hasta que en el 2010 fui al Open Rok que organizaba Fernando Alonso en España, gané y salí campeón. Ese mismo año corrí en la Copa de Campeones que se hace a fin de año e hice gran carrera, avanzando mucho en la final. Y tras 11 años de karting llega el momento de los monopostos. - Así es. Este año me tocó subir a un fórmula y lo hice con un Crespi en una prueba en Marcos Juárez, con la caja de cambios, dimensiones y amortiguación que nunca había manejado. Debí adaptarme y saber manejar con cargas aerodinámicas, pero lo hice bien, de a poco. Todo es adaptación, es como empezar de cero, pero con la ventaja de haber hecho karting que es una buena base. Además ahí trabajar con Franco Girolami hace todo más fácil, él ayuda mucho. En la primera carrera me fue bien, llegué 6to, y con lluvia en otra carrera también anduve bien. Con el Tito no fue lo mismo porque tenía el antecedente de otro formula. Por más que sea otro tipo de manejo ya la experiencia estaba. Con los chasis de la FR2.0 se va distinto, es como más tranquilo y debí acostumbrarme a la caja secuencial. Se me hizo más fácil por la base del Crespi y también por tener a Martín Chialvo él tiene experiencia y logra adaptarse muy rápido a los circuitos y eso me ayuda. Más allá de ser todo muy reciente los resultados se están dando de manera positiva? - Los resultados son relativos, uno puede hacer todo bien y terminar tercero y por ahí hacer las cosas un poco peor y terminar segundo. Cómo todo en este deporte hay que aprovechar las oportunidades en pista. Por ejemplo en la carrera anterior en Oberá no pude hacerlo pero también soy consciente que tengo que seguir conociendo el auto y encontrarle más el límite. Todavía no llegue a ese límite del auto. Me falta esa pizca de confianza que se hace girando así que continuaremos aprendiendo carrera a carrera en la Fórmula Renault 2.0. ¿En el karting aún quedan desafíos pendientes? - A nivel nacional voy a terminar el Campeonato Argentino de éste año y en Octubre voy a correr la Internacional Rok Cup en Italia. Ahí se accede por invitación con un cupo limitado y es un orgullo haber sido seleccionado, sería un pecado no poder ir. En Argentina no existe ese campeonato, el dueño de la Tony Kart oficial va viendo pilotos para llevar y de nuestro país vamos 8 creo, yo correré en la Super Rok. Con destacados antecedentes en el karting, con un promisorio futuro inmediato en esa especialidad a nivel mundial y con un exitoso presente en vehículos de fórmula a nivel nacional, Matías Fernández, con tan solo 16 años, hace camino al andar.